viernes, 1 de marzo de 2013

Capítulo 14.

Capítulo 14. El beso, el regalo y una nueva enemiga.

*Narra Lexi*

Me levanté por la mañana un poquito más tarde de lo que había planeado. Había quedado para comer con Zayn, en su día. Su cumpleaños. Y él me pasaría a recoger dentro de una media hora. Me metí en la ducha corriendo y en cinco minutos ya estaba delante del espejo intentando desenrredar mi pelo. Pero como me ocupaba tiempo, me corté un pequeño mechón de pelo. No se notaba. Rebusqué por todo el armario algo bonito para ponerme. Una chaqueta, con una camiseta granate con tacto de terciopelo, unos tejanos claros, unas botas negras con cordones y un colgante de un lazito. Justo sonó el timbre y como loca fui a abrir la puerta.




-¿Por que te falta un trozo de pelo?- me saludó con esa pregunta. Y yo que pensaba que no se notaría.

-Hola a tí también, cariño. Felicidades. Y también te quiero mucho- dije burlona. Negó con la cabeza, para después darme un dulce beso en los labios.

-Hola bonita, te quiero mucho- susurró en mis labios, haciéndome reír. Le abracé fuertemente por la cintura, com mi cabeza en su pecho.

-Muchísimas felicidades chico malo- rodeó con sus brazos mi espalda y besó mi cabeza. Por detrás aparecieron Jenna y Maddy, que empezaron a gritar el cumpleaños feliz a todo pulmón.

-Vámonos Lexi, me dan miedo- me susurró en medio de la canción. Asentí riéndome, le di mi mano y salimos corriendo de casa.

*Narra Jenna*

-... Te deseamos to...- paramos porque los dos se fueron corriendo. Jo, yo que hoy tenía ganas de cantar. Miré de reojo a Maddy mientras soltaba un bufido. Estaba mirando la nada, mordiéndose los labios. Me miró. Y para molestarla subía y bajaba las cejas, con una sonrisa traviesa.

-¿Qué?- preguntó nerviosa.

-¿Qué ha pasado, Maddy? Ya sabes que te pasará si no me lo cuentas- amenacé.

-Ni me lo recuerdes- bufó, con los brazos cruzados sobre el pecho.

-¿Me lo cuentas?- me balanceé sobre mis pies, con las manos en mi espalda.

-Pero ni una palabra a nadie, ni a Louis- asentí con la cabeza-. Ayer Harry me besó- pegé un pequeño grito-. Y me gustó, mucho- ahora ya grité más fuerte. La abracé efusivamente, descargando toda mi alegría en ella. ¡Ya era hora de que Harry se lanzara!

-¿Y? ¿Algo más?- Maddy bajó la cabeza.

-No, no dijimos nada al respecto. Seguimos como normalmente, pero lo notaba muy nervioso, incluso peor de lo que estaba yo.

-Mm... Interesante- dije, pensando. Tendré que hablar con el señorito Styles. Tendré una charla pendiente con él.

*Narra Gwen*

Ya no me aburría tanto en Manchester, con mis nuevas vecinas conmigo. Nos la pasábamos todo el día haciendo cualquier cosa. Desde ayer por la tarde, cuando conocí a la irritante de Jennette, que no nos la hemos vuelto a encontrar. Y mejor, no tenía ganas de hablar con alguien como ella. Hoy era el cumpleaños de Zayn y decidí llamarle a eso de las seis de la tarde. Shirley, Bic y Katy se unieron a la conversación, tenían ganas de hablar con él.

-¿Coco?- preguntó Zayn. Noté una pequeña sonrisa de su parte.

-Felicidades chico malo- exclamé entre risas.

-Gracias Coco marranote- se carcajeó. Shirley, Bic y Katy, que escuchaban la conversación por el altavoz, empezaron a reír a carcajadas. Me sonrojé-. ¿Con quién estás, Gwen?

-Con unas amigas- las miré-. Saludad chicas- dije.

-Hola Zayn- dijeron Shirley y Bianca, un poco tímidas.

-Vas Happenin'- gritó Katy riéndose. Escuché la risa de Zayn y alguien más.

-¿Y tú con quién estás, eh?

-Con la preciosa de mi novia.

-¿Quién?- dije de burla.

-Lexi, tonta- dijo ella, intentando parecer molesta.

-Ya lo sabía- saqué la lengua, aunque era inútil, no me podían ver.

-Oyeeeee, Lexi; ¿Se lo preguntas tú o yo?- dijo Zayn.

-¿El qué?- contestó ella.

-Lo que nos dijo cierta persona, sobre... Ya sabes... Éso- explicó.

-¿Éso?

-Si, éso.

-Pues no sé a qué te refieres- estallamos a carcajadas.

-Y luego soy yo el que no pilla las cosas.

-¿Insinuas algo, cielo?

-Claro que no, cariño- nos volvimos a reír.

-Pues ya se lo pregunto yo- suspiró.

-¡Ah!- exclamó, como si se acabase de acordar de algo-. ¿Te refieres a éso?

-¿Qué éso?

-Da igual, yo me entiendo chico malo. Oye Gwen, ¿Me darías la dirección de tu casa? De Manchester, eh.

-Claro- sonreí y se la di.

-Bueno, gracias Coco. ¿Nos veremos pronto, no?

-Cuando a vosotros os dé la gana de visitarme- dije.

-Vale- rió-. Entonces nos veremos muy pronto, supongo.

-Un beso, os quiero malotes- les lancé cuatro besos.

-Y nosotros a tí Coco- exclamó Zayn y colgó.

-Katy eres tonta- dijo Shirley.

-¿Por?- preguntó Katy confundida.

-Me he muerto de vergüenza ajena, jo- se quejó con los brazos en jarra.

-Va, tonterías- se colocó la gorra para atrás y pasó una mano por su frente. En un gesto raro. Que nos hizo reír a todas.



*Narra Zayn*

Después de hablar con Gwen, marqué el número de Liam y otra vez puse el altavoz, para que Lexi también escuchase y hablase. Tardó un rato en cogerlo.

-¿Zayn?

-Hola- saludamos Lexi y yo.

-¿Qué ocurre?- preguntó.

-Ya sabemos donde vive Gwen- dije y escuché como a Liam se le caía algo y gritaba-. Oye Liam, ¿Estás bién?

-Si si- dijo rápido-. Estaba ordenando la cocina y se me ha caído un vaso. Al menos era de plástico y no se ha roto. ¿Pero de verdad?

-De verdad- rió mi chica mala.

-Aaaaai, como os quiero- gritó. Nos reímos.

-Ale, nos vemos Liam- nos despedimos y colgé.

Volví a coger la mano de Lexi y continuamos caminando por la calle, hablando de todo un poco. Era muy fácil hablar con ella. Siempre tenía algo que decir y nunca le faltaban las bromas. Me quedé como tonto mirando como movía los labios al hablar, hasta que no aguanté, la cogí de la cintura y la besé. Cosa que ella aceptó encantada.



*Narra Laura*

-¿Crees que nos ha quedado rico?- preguntó Niall cuando saqué las magdalenas del horno. Las miramos detenidamente y con una sonrisa, dije:

-Estarán deliciosas.

-Mejor, porque tengo hambre- dijo y reí.

-Yo también- ahora se rió él. Cogí una magdalena de chocolate y Nialler se cogió otra y le puso gominolas por encima. Contamos hasta tres y nos metimos las magdalenas en la boca. Acabamos riendo.

-Tienes la boca manchada- susurró cerca de mí, cuando ya me había acabado mi magdalena. Se acercó y con sus manos en mi cintura me besó tiernamente.

-¿Sabes que te quiero mucho?- pregunté con una sonrisilla en los labios.

-¿Sabes que yo también?- preguntó él. Nos reímos. Volvimos con las magdalenas y nos entretenimos decorándolas con crema de chocolate, más gominolas y otras cosas que encontrábamos por casa.

-Oye Nialler, ¿Me dejarías probar la magdalena arcoiris?- sonreí inocentemente.

-Claro Lau, toda para tí- contestó y contenta le di un pequeño beso en los labios. Cogí la magdalena arcoiris y probé un mordisco. Estaba realmente deliciosa y mira que era la primera vez que la hacía-. ¿Me dejas probar?

Le acerqué la magdalena y la mordió suavemente.

-¿Te gusta?- le pregunté.

-Está deliciosa- rió-. Le podríamos preparar unas cuantas a Zayn para su cumpleaños. Y con las chuches las decoramos para que parezca que llevan un arcoiris por encima, ¿Vale?

-Me parece buena idea, pero primero a comernos estas magdalenas, que tengo hambre.



*Narra Madison*

No me podía sacar de la cabeza el beso de ayer. Juro que no podía. Era recordarlo y empezar a sentir cosquillas en el estómago. Incluso en los labios. Nunca habría pensado que Harry me besaría, es decir, ¿Por que me besó? Yo no soy como todas las demás chicas, no tengo nada de especial. Solo soy un gnomito refunfuñón.

Salí de mis pensamientos al escuchar mi móbil sonar. Era Harry.

-Maddy, necesito que me acompañes a comprar el regalo de Zayn- suplicó. Sonreí tiernamente.

-Claro Hazza, ¿Me pasas a buscar?

-Claro que si- sonreí-. Nos vemos ahora Gnomito. Y gracias.

-Hasta ahora Harry- colgé y me fui a preparar. Me puse una camiseta blanca de los Beatles, una sudadera de Jack Wills gris, unos tejanos y unas botas negras. Me hice una cola alta y me pinté la raya del ojo. Justo sonó el timbre y bajé corriendo para abrir la puerta, pero Jenna se me adelantó.



-Oh, hola Harry- saludó dejándolo pasar.

-Hola Jenna, ¿Está Maddy?- me acerqué donde estaban ellos y saludé a Harry con un beso en la mejilla, que hizo que nos sonrojáramos, los dos.

-Aquí estoy.

-Pues nosotros ya nos vamos, ¿No?- asentí.

-Oye Hazza, luego hablamos, ¿Si?- dijo Jenna con una ceja levantada.

-Em... Vale- sonrió-. Vámonos Maddy- cogió mi mano y salimos de casa.

-¿Qué tienes pensado comprarle a Zayn?- le pregunté cuando ya estábamos en el coche.

-Ni idea, por éso te había llamado- rió.

-¿Le regalamos un espejo?- me miró de reojo.

-¿Regalamos, tu y yo?

-Si, yo tampoco tengo regalo.

-Pues le regalamos un espejo.

Dicho y hecho, le compramos el mejor espejo que encontramos en el centro comercial.

*Narra Gwen*

Nos fuimos a una heladería y nos compramos un helado cada una. En realidad el mío me lo pagó Bic, porque no llevaba dinero encima. Nos lo íbamos comiendo y de mientras, charlando de cualquier cosa. Íbamos por un barrio que nunca había ido (además de que tampoco es que conociese Manchester más allá de mi casa, la de Katy, la de Bianca y Shirley y el parque). Noté a Shirley más nerviosa que lo normal, pero no sabía porque. En un momento oímos la puerta de una casa abrirse, y de allí salió un chico, bastante guapo pero nada comparado con Liam, con una tabla de skate. Shirley me clavó las uñas en el brazo cuando el chico nos miró y nos saludó sonriente. Katy y Bic le devolvieron el saludo como personas normales, no como Shirley que por poco se tropieza con sus propios pies y me lanza el helado en la cara. El chico se fue en su tabla sin volver la vista hacia atrás.

-¿Quién era ése?- pregunté.

-El amor platónico de Shirley- comentó Bic y Shirley bajó la mirada.

-Es el 'novio', por así decirlo, de Jennette- añadió Katy con la mirada al final de la calle.

-¿Esa tipa tiene novio?- no aguanté más y me puse a reír.

-Bueno, una especie de novio. Actuan como tales cuando estan cerca de Shirley, al menos Jennette es la que actua. Se pasa todo el día ignorándolo y cuando ve que habla con Shirley se lanza a él y se lo lleva.

-Que idiota es Jennette- solté, un poco más alto de lo que quise.

-¿A quién llamas idiota?- escuché su maldita voz a nuestras espaldas. Nos giramos, para poder verla con sus perritos falderos: Camille y Julie.

-A tí- contesté de lo más normal. Se acercó y me pegó una bofetada. Le miré con la boca entreabierta, de la sorpresa. ¿Quién se creía ésta para venir aquí y pegarme?

-Serás zorra- escupió Katy, a punto de lanzarse sobre Jennette. Pero Shirley y Bianca se encargaron de sujetarla. Cogí mi helado, me acerqué a Jennette y se lo tiré encima. Agarré la mano de Shirley y las cuatro nos pusimos a correr calle abajo. Riendo sin control. Antes de meterse con este Coco, que se lo piense mejor. Si no, aquí tiene una nueva enemiga.

*Narra Laura*

Sacamos las magdalenas arcoiris del horno. Se veían deliciosas. Nialler cogió la bolsa de chuches y estuvimos un buen rato para hacer los arcoiris sobre todas las magdalenas. Pero milagrosamente acabamos justo cuando la puerta de casa se abrió, y entraron Lexi y Zayn. Rápidamente les pusimos unas velas a las magdalenas, que casualmente eran 20, los años que cumplía Zayn, las encendimos y salimos de la cocina cantando el cumpleaños feliz. Zayn se acercó de la mano de Lexi y cuando acabamos de cantar, apagó todas las velas de un soplido. Nos sonrió ámpliamente.

-¿Es mi regalo?- preguntó emocionado. Niall y yo asentimos con la cabeza-. Muchísimas gracias, tienen muy buena pinta.

-Ni lo dudes; que somos buenos cocineros- dije. La puerta se abrió otra vez. Eran Maddy y Harry. Vieron a Zayn y se acercaron corriendo a abrazarle. Cuando se separaron Harry le entregó un regalo. Zayn lo abrió emocionado, y pegó un enorme grito al ver su regalo, un espejo. Abrazó de nuevo a Madison y a Harry y les dijo un millón de veces que le gustaba mucho su regalo.

-¿Nos comemos las magdalenas?- pregunté y todos asintieron. Nos fuimos al salón y justo al entrar, Jenna y Louis salieron de detrás del sofá, asustándonos.

-¡Felicidades!- gritaron los zanahorios al unísono. Se acercaron a Zayn y le entregaron un sobre. Zayn lo abrió, confundido. De allí sacó un papel que leyó en voz alta.

-Vale para un abrazo (De Jenna y Louis)- dijo entre risas.

-¿Y tú que le has regalado, Lexi?- preguntó Madison.

-Mi corazón; ya que antes lo había robado, así que yo solamente se lo he regalado. No quiero que sea un ladrón- explicó sonriente.

-Y también me ha regalado un perfume- añadió Zayn.


Bueno bonitas, aquí está el capítulo:) Reconozco que no me gusta mucho como acaba, pero no sabía como acabarlo xD Espero que os guste mucho mucho mucho, valep?
Besitooooooooooos

4 comentarios:

  1. ¡Siempre nos gustan tus capitulos!
    Es genial, que monos los de las magdalenas me encantan ajshfcbsdhjbfsjfjhsdbfs
    ¡SIGUIENTE!

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